Quietud y silencio

Entra en el nuevo año sabiendo que ante ti se presentan 12 meses realmente maravillosos. Contempla cómo surge lo mejor de todas la cosas. Todas las cosas buenas tienen comienzos pequeños. El poderoso roble surge a partir de una diminuta bellota. A partir de un pequeño pensamiento de fe y creencia pueden surgir maravilla tras maravilla.

Tómate tiempos de quietud y silencio. Tiempo para la interiorización y el autoconocimiento, para saber quién y qué se es por experiencia directa, sin conceptos ni ideas preconcebidas o adquiridas de los demás.

La quietud es poderosa. Nos da tiempo y espacio para reflexionar y escuchar nuestros pensamientos. La meditación y la respiración consciente nos ayudan a “dejar pasar a los pensamientos”.

En nuestros cerebros hay actividad todo el tiempo, sólo podemos limitarnos a ser observadores tratando de silenciar el diálogo interno que agota nuestra energía, de la mano de la respiración, se ilumina el camino.

“El cuerpo sigue a la mente y la mente a la respiración. Cuando la mente está confundida y la haces meditar, automáticamente te acompaña”